Los viajes de aventura son una vuelta a la niñez, al asombro de la niñez. No es fácil: implica salir de la zona de confort. Dejar atrás lo conocido. Aventurarse en una cultura nueva: otros olores, otra lengua, otra manera de vincularse, otros códigos.
El viaje de aventura, por un lado, regala el placer de los sentidos: paisajes espléndidos. Por otro lado, permite ver en perspectiva los propios patrones de comportamiento. Viendo lo nuevo (animándote a
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relacionarte con lo nuevo) se reconfigura lo viejo: uno mismo.
Cada paquete de aventura trae el germen de la transformación. Puedes viajar hacia la Antártida, conocer Alaska, explorar los confines de cada uno de los continentes. Nuestros circuitos de aventura son un viaje externo e interno. ¿Te animas? Mira los paquetes de aventura que hemos preparado. Pero si te gustaría hacer algún viaje de aventura especal, sólo tienes que solicitar información.a tu medida, para ti o tu grupo de amigos.